Se trata de una nueva resolución del gobernador de Rogelio Frigerio que busca frenar el impacto negativo del ciervo axis y del jabalí en los sistemas productivos y medioambientales; los productores piden una ley
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Si bien los productores entrerrianos destacaron la iniciativa del gobierno provincial de avanzar en una resolución que habilita a que los cazadores puedan aumentar el número de presas de ciertas especies exóticas, remarcaron que todavía falta mucho camino por recorrer porque dicha normativa debe estar enmarcada en un paraguas legal en caso de que se presente algún tipo de amparo judicial que frene su aplicación.
En detalle, la Dirección de Recursos Naturales y Fiscalización modificó la resolución 1425/16 por la cual se reglamenta la caza deportiva mayor y elevó la cantidad de especies invasoras para cazar durante el día los fines de semana: se permitirá tres ejemplares de ciervo axis, cuatro de jabalí y uno para el antílope negro, Además, permitirán el transporte de dichos animales por “cada cazador autorizado y por excursión”. Antes era un solo animal por cazador autorizado.
En la normativa, que lleva la firma del director de Recursos Naturales y Fiscalización, Antonio Sapetti, consideraron que dichas especies para la práctica de caza deportiva mayor “corresponden a especies exóticas de la Argentina e invasoras en todo el territorio provincial”. Además que son “especies reconocidas por la comunidad científico-técnica y por los productores agropecuarios como perjudiciales en campos de cultivos y deterioro de bosques nativos, causando pérdidas económicas por el daño en las chacras, además al ganado y a la fauna nativa y que desarrollan fuerte competencia por espacio y los recursos naturales con la fauna nativa, entre otras”.
Según explicaron en la cartera agrícola provincial, se trata de un primer paso y por ahora es para la caza deportiva, donde se mantiene los mismos requerimientos hasta la actualidad: solamente los fines de semana y la caza diurna, por las cuestiones de abigeato y seguridad rural.
“Hasta ahora había un cupo de dos animales por cazador y podían llevarse uno; ahora se lo duplica. Se está duplicando la cantidad de animales que pueden cazar los cazadores deportivos los fines de semana y de día, con todas las autorizaciones del dueño del campo”, explicó Nicasio Tito, presidente de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer)
La próxima instancia será ir por una caza controlada, de lunes a viernes, de noche, con mira infrarroja, donde no habrá cupo de animales. “Todavía no lo tenemos pero eso es lo nuevo en lo que estamos trabajando”, indicó. Vale recordar que la caza de los ciervos es casi siempre nocturna, por lo que hasta el momento no estaría permitida.
Pero esto no sería suficiente, faltaría una ley que declare como plaga estas especies para darle un marco de legalidad y razonabilidad más completo. En la Cámara de Diputados provincial, este proyecto de ley ya tiene dictamen en la Comisión de Recursos Naturales y Ambiente y solo faltaría su votación final. Este miércoles, se conseguiría finalmente la media sanción pero el cuello de botella está en el Senado, donde el gobernador Frigerio no cuenta con mayoría.
Ahí, va estar el trabajo de las entidades ruralistas para lograr que se convierta en ley. “La media sanción en Diputados está al salir y pasaría al Senado, donde los hilos lo maneja el peronismo opositor. Hay que trabajar más detalladamente para generar su aprobación”, remarcó el presidente de Farer.
No obstante, antes, el Senado provincial debe tratar la ley de Fitosanitarios que ya tuvo media sanción en Diputados, por lo que la norma vinculada con la fauna llegaría a votación a fin de año.
“Si tenemos suerte, lo sacamos este año, si no va a ser complicado. Es fundamental que se declare plaga, pero también entendemos lo que está haciendo el Ejecutivo, trabajando para garantizar algunas cuestiones especiales en cuanto a la caza. Nos explicaron que lo que se trata de replicar lo que se realiza en El Palmar de Colón, donde hay una caza autorizada para controlar para que no maten a los carpinchos que están ahí”, describieron.
Lo que habría buscado Frigerio es anticiparse ante la enorme problemática para que, cuando esté la ley sancionada, en forma complementaria, tener la puesta en marcha del programa más aceitado, hablando ya con Policía Caminera y con las direcciones de Abigeato y Bromatología.
En este contexto, recordaron lo que ocurrió en la provincia de Corrientes, donde la Legislatura de esa provincia declaró como plaga pero “la ley durmió el sueño de los justos”, porque nunca tuvo aplicabilidad. Recién ahora, luego de dos años, el gobernador correntino Gustavo Valdez está analizando reglamentarla.
“Sacar una ley por sacar no sirve para nada. Frigerio fue al revés y puso en marcha esta resolución para anticiparse y complementar la declaración de plaga. Es un primer paso y lo vemos como positivo porque hay una decisión política del gobernador de avanzar al respecto”, destacó Tito.
“Tras varios años de desidia y abandono y de no importar nada, en menos de dos meses se avanzaron muchos casilleros. Hoy se está trabajando en el Legislativo y en el Ejecutivo, a la vez. Por nuestra parte, vamos a estar a disposición para explicar todo el daño ecológico y productivo que generan estas plagas y estar atento a que la ampliación de caza sea lo más controlada y estricta posible”, concluyó el presidente de Farer.